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Una vecina del lugar donde se estrelló el avión en San Fernando, contó cómo fueron los últimos momentos de los pilotos.

 

 

 

 

Tras el accidente del avión que se estrelló cerca del aeropuerto de San Fernando, la Justicia está indagando las diferentes teorías sobre lo que pudo haber sucedido. Sin embargo, una vecina compartió dramáticos detalles sobre los últimos instantes de los pilotos Martín Fernández Loza, de 44 años, y Agustín Orforte, de 35.

 

 

 

Narcisa, es la propietaria de la vivienda en la que se impactó el avión privado, un Challenger 300 (matrícula LV-GOK), que venía de Punta del Este y según comentó, estuvo a pocos metros de la aeronave cuando estalló y fue testigo de la tragedia.

 

 

 

 

La mujer relató que observó cómo el avión “se llevó el árbol” y de “fue bajando despacito en su vereda” hasta impactar contra su vivienda e incendiarse. Según afirmó, la aleta del avión pasó a escasos metros de su rostro y aseguró que del aparato salían “se escuchaban a una cuadra”. “Sacame de acá por favor”, dijo haber oído gritar a Fernández Loza y Oforte.

 

 

 

 

 

 

 

Los restos del avión en las afueras del aeropuerto de San Fernando. (Foto: AP / Natacha Pisarenko)

 

 

 

La vecina del aeropuerto mencionó que desde la entrada de su casa podía observar todo lo que sucedía dentro del avión. “El piloto y el copiloto se abrazaron antes de morir”, declaró. Aclaró que solo salió corriendo cuando el aparato estalló. “Ahí se incendió todo y fallecieron”, contó a los medios.

 

 

 

 

Las primeras investigaciones realizadas por los médicos de la Policía Federal Argentina (PFA) indicaron que las víctimas, Fernández Loza y Agustín Orforte, podrían haber muerto por intoxicación con monóxido de carbono. Según esta versión, los pilotos quedaron atrapados en la cabina, la única parte del avión que permaneció intacta, ya que sus cuerpos fueron hallados con los cinturones desabrochados.

 

 

 

 

 

Un bombero inspecciona los restos del Challenger 300 que se estrelló en San Fernando. (Foto: AFP/Juan Mabromata)

 

 

Narcisa también mencionó las recientes maniobras de los pilotos, las cuales permitieron detener el aparato y evitar que chocara de lleno contra su casa. “Dios es grande, sino estábamos todos muertos adentro”, expresó.

 

 

 

 

 

Las hipótesis que examinan los investigadores después del accidente aéreo en San Fernando

 

 

 

 

En principio, el análisis inicial de la Junta de Seguridad en el Transporte (JST) sugiere un posible “error humano del piloto, que desencadenó la tragedia”. Sin embargo, el enfoque de los investigadores también se centrará en el papel que desempeñaron los bomberos después del terrible accidente.

 

 

 

La teoría principal indica que el avión, operado por el piloto Martín Fernández Loza un profesional altamente capacitado podría haber aterrizado «corto de pista». Esto implica que tocó tierra más allá del punto óptimo, quedando solamente 280 metros hasta el alambrado perimetral. El impacto, a una velocidad cercana a los 380 km/h, destruyó el fuselaje y causó la explosión de los tanques de combustible, ubicados en las alas de la aeronave.

 

 

 

 

Respecto al trayecto que realizaron los aeronavegantes, se confirmó que descendieron en paralelo por el río Reconquista, giraron para aterrizar y bajaron paralelamente a la avenida Hipólito Yrigoyen. Finalmente, atravesaron la calle Charlín y chocaron contra una de las casas de la zona.

 

 

 

 

El avión se despistó y se incendió. (Foto: AFP/Magali Cervantes).

Recibieron una triste noticia antes de despegar

 

 

 

Otra versión dice que antes de despegar de Punta del Éste Uruguay, le informaron al piloto que se quedaba sin trabajo porque iban a vender el avión. Esta es otra punta de la investigación, para saber si esta mala noticia pudo haber influido en el estado anímico de Martín Fernández.

 

 

 

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