Durante la historia política argentina, son muy pocos los vicepresidentes que llegaron al final de su mandato sin peleas o rupturas con el presidente. Algunos afirman que existe una maldición del vicepresidente.
Muchos se horrorizan por y vaticinan un escándalo gigante por la pelea entre Javier Milei y su vicepresidente Victoria Villarruel, pero lo cierto es que gran parte de los segundos en el poder en el país, no terminaron remando para el mismo lado con el primer mandatario.
Desde el retorno de la democracia en 1983 a la actualidad, solo hay dos que terminaron en armonía.
Víctor Martínez, vicepresidente que acompañó a Raúl Alfonsín desde 1983 a 1989, es uno de los únicos que mantuvo la lealtad y acompañó al presidente sin enfrentamientos ni rupturas.
Eduardo Duhalde fue vicepresidente de Menem desde 1983 a 1991 y renunció a la mitad del mandato para asumir como gobernador de Buenos Aires, luego se enfrentó al menemismo.
Carlos Ruckauf, vice del segundo mandato de Carlos Menem, también usó el cargo como trampolín político y llegó a la gobernación de Buenos Aires. Aunque se alejó de la Casa Rosada, fue un alejamiento controlado.
Carlos “Chacho” Álvarez terminó muy mal con Fernando de la Rúa y renunció tras los escándalos por los sobornos en el Senado.
Daniel Scioli como vicepresidente de Néstor Kirchner, tuvo algunas diferencias al comienzo del mandato. Scioli era cuestionado por tener un perfil dialoguista. Aunque después limaron las asperezas y terminaron bien el primer mandato.
Julio Cobos, vicepresidente de Cristina Fernández de Kirchner fue una de las rupturas más estrepitosas de los últimos años. Con aquella recordada frase; “mi voto no es positivo” Cobos se enfrentó a Cristina al negarse a apoyar la ley de retenciones al campo.
Amado Boudou, vicepresidente de Cristina en su segundo mandato, fue condenado por corrupción en el caso Ciccone mientras ejercía el cargo. Fue protagonista de uno de los más grandes actos de corrupción en plena función.
Gabriela , la vicepresidente de Mauricio Macri, no tuvo enfrentamientos con el presidente, pero perdió prácticamente todo el protagonismo y quedó prácticamente invisible.
Cristina Kirchner como vicepresidente de Alberto Fernández, estuvo envuelta en un enfrentamiento con el presidente hasta el fin de mandato. Siendo protagonista de una de las peleas políticas más candentes de los últimos tiempos.
Victoria Villarruel está enfrentada a Javier Milei y ya no tiene diálogo con el gabinete, ni siquiera es aceptada por los simpatizantes de La Libertad Avanza.
Es decir que desde 1983 hasta hoy, solamente Víctor Martínez acompañó fielmente al expresidente Raúl Alfonsín sin diferencias, sin cuestionamientos, traiciones o rupturas.
