Dos siniestros viales en Misiones dejaron múltiples heridos y dos conductores alcoholizados detenidos. Uno de los casos incluyó una víctima en estado grave.
Dos siniestros viales ocurridos en las últimas horas en Misiones volvieron a encender las alarmas sobre la conducción bajo efectos del alcohol. Ambos episodios tuvieron como denominador común conductores con alcoholemia positiva, víctimas lesionadas y procedimientos policiales con secuestro de vehículos e intervenciones de Policía Científica.
El primer hecho se registró el lunes por la tarde sobre la Ruta Provincial N.º 3, a la altura del kilómetro 20, cuando un Fiat Cronos que viajaba desde Cerro Corá hacia Andrade terminó despistando y cayendo a un barranco cubierto de malezas. El vehículo era manejado por René S. (42), quien iba acompañado por cinco personas: Roxana Y. (37), Nahiara (14), Armando Y. (62), Gladys P. (57) y una adolescente de 14 años.
Tras el despiste, todas las ocupantes fueron derivadas al hospital de Cerro Azul. Cuatro de ellas no presentaban lesiones visibles, mientras que Gladys P. sufrió traumatismos en el hombro y tórax. Durante las tareas de peritaje, la División Policía Científica detectó que el conductor tenía 1,1 g/L de alcohol en sangre. Por ese motivo se labró la infracción, el vehículo quedó secuestrado para pericias y el hombre fue demorado por infracción a la Ley Nacional de Tránsito.
Horas más tarde, alrededor de las 20:45, otro siniestro de gravedad sucedió la ciudad de Apóstoles. Allí, una motocicleta Honda Titán conducida por Pedro Guillermo K. (19) embistió a una peatona —Ariana Andrea B., de 32 años— cuando cruzaba la senda peatonal en la intersección de las avenidas Sarmiento e Islas Malvinas.
La mujer sufrió un traumatismo de cráneo con pérdida de conocimiento y fracturas de consideración, por lo que fue trasladada de urgencia al hospital local. El motociclista, en tanto, presentaba una lesión contuso-cortante en el rostro.
Al realizarse las pericias, Policía Científica confirmó que el joven circulaba con 0,50 g/L de alcohol. Por disposición judicial se ordenó su inmediata aprehensión y el secuestro del motovehículo.
Ambos casos quedaron a disposición de los magistrados intervinientes, mientras se profundiza la investigación sobre las responsabilidades de cada conductor y el estado de las víctimas.
