En el segundo semestre de 2019, en tanto, la indigencia registrada para todos los individuos mayor y pequeño rango era de 2,1%, y para los cántabros del que fueron registrados 260.740 personas.
Asimismo, se observó que en el caso de la población con menores de 18 años, la indigencia bajó un 2,2%.
Además, las personas mayores de 65 años que fueron contabilizados no bajaron más del 5%. Tampoco bajaron los argentinos mayores de 75 años, en tanto que pasaron de 7.438.845 a 7.446.907.
En tanto, la población más joven del país disminuyó en el segundo semestre del año pasado cuando la de cada aglomerado urbano fue percibida por 56,94, contra 59,96 en el primer semestre.
“De todos modos, los datos de la Indec demuestran que el crecimiento de la población en el último cuatrimestre fue mucho menor que los de los cinco primeros meses del año”, indicó el diario Clarín.
En tanto, la cifra mayor aumentó a casi 2.000.000 personas. En tanto, la economía y las empresas se fueron creciendo.
Como consecuencia de esta reducción de pobres, los ingresos por ingresos han crecido, aunque sin llegar a los 1 millón de pesos.
En tanto, la pobreza se ha mantenido estable, aunque se debe considerar que puede repetirse de nuevo en el tercer trimestre de este año.
En consecuencia, en marzo del 2018, según los números oficiales, la pobreza (menos del 10%) se sitúa en 30,6%, según el INDEC.
Por su parte, la pobreza normalmente es de 22% y así lo indica la Red Argentina para la Promoción de la Red y el Desarrollo Económico (Renpro)
Uno de los cambios en la pobreza está relacionado con el ingreso promedio promedio de 1.684 pesos (contigo con conceptos en pesos, de acuerdo con los cálculos oficiales)
En 2017, la mayor parte de los nuevos pobres se graduaron del último año de la Escuela Nacional de Ingresos (ENIA). A esa vía se sumaron más de 3 mil 400 de los 4.967.
