En cuanto a los medicamentos, la restricción a la importación de solamente un 5% con respecto a 2021, lo que dificulta el suministro de insumos para la detección y tratamiento de enfermedades complejas. Creen que las carencias se empezarán a notar en el segundo semestre.
Barreras a las importaciones que buscan cuidar las Reservas del Banco Central (BCRA) crean alarma entre los distintos factores productivos. Ha habido quejas de laboratorios y empresas automotrices de que la falta de divisas extrajeras, afecta las líneas de producción y dificulta las entregas.
En las últimas semanas, se suma una alarma del ámbito de los reactivos de laboratorio. Estos son insumos necesarios para un diagnóstico y tratamiento posteriores. En numerosas notas a las autoridades, los importadores de estos artículos advierten que de mantenerse las retenciones, el segundo semestre presentará complicaciones para quienes necesiten estudios de diagnósticos.
Tanto la Subcomisión de Reactivos y Elementos de Diagnóstico de la Unión Proveedores del Estado (UAPE) la Cámara de Importadores y la Cámara Argentina de Insumos, Implantables y Equipamiento Médico (Cadiem) remitieron sus inquietudes a las autoridades e intentó alertar sobre un posibles desabastecimientos.
Los reclamos se multiplican a partir de la circular «A» 7466 del BCRA que en definitiva restringe las importaciones (con excepción de los productos médicos relacionados con el diagnóstico y tratamiento del Covid-19)
Para 2022, los importadores podrán recibir dólares en una suma anual igual al menor de los dos niveles inferiores: importaciones de 2020 más 70% o importaciones de 2021 más 5%. Si el monto declarado es menor a $50,000 o el importador no se ha registrado para importar en 2020 y 2021, el límite anual aplicable será de $50,000.
Representantes de Cadem se reunieron con Mauricio Monsalvo, secretario administrativo del Departamento de Salud, para que solicitara al BCRA la exclusión o priorización de productos en un área importante para el sistema de salud. Además, presentaron una lista de productos médicos (con sus fracciones arancelarias) y radicaron notas ante el BCRA, el Ministerio de Desarrollo Industrial y el Ministerio de Salud.
Fuentes oficiales consultadas por los medios, dijeron que las importaciones continuaron aumentando a un nivel récord registrado en marzo y se confirmará este mes. Además, destacan que la regulación permite un aumento en relación a lo comprado en el exterior en 2021.
Por otro lado, en el rubro de importaciones de reactivos de diagnóstico (desde Europa, EE.UU., Israel y China), explicaron que los precios internacionales aumentaron en un promedio de 5% y la demanda interna también aumentó, porque el paciente está en proceso de estudios que fueron postergado por la pandemia en el 2020 y el primer semestre del 2021.
“Hay una parte que se puede prever, que son los enfermos crónicos; pero hay otra que son urgencias. Por ejemplo, pacientes que presentan una infección hoy y necesitan saber qué tienen exactamente para determinar el tratamiento. Eso tiene una ventana de tiempo y estas trabas generan más demoras que la persona no siempre puede soportar”, explicó una fuente de la industria.
Si bien aún se pueden realizar algunos controles de rutina en los principales sustitutos nacionales, indican claramente que ciertos productos son extranjeros y no hay sustitutos nacionales. Los insumos faltantes se utilizan para identificar y diagnosticar patologías complejas. Por ejemplo, se utilizan en microbiología (para el control de infecciones), diagnóstico neonatal, detección de cáncer y enfermedades infecciosas (como el VIH o la meningitis) y en medicina de trasplantes.
El argumento que los gobiernos suelen utilizar para bloquear las importaciones es evitar comprar por adelantado en el extranjero para aprovechar los precios oficiales en dólares. Sin embargo, para los reactivos de laboratorio, estos son productos que han pasado su fecha de vencimiento y no se pueden almacenar indefinidamente. Fuentes oficiales dicen que el BCRA y el Departamento de Salud están trabajando juntos para abordar problemas específicos que puedan surgir.
“Queremos conversar con las autoridades y ver si podemos, al menos, lograr que se cataloguen algunos productos como urgentes y se los exima de estas últimas restricciones”, pidieron a la industria.
