Todo comienza con una atracción irresistible por la otra persona, que desemboca en el amor, donde la química emocional juega un papel importante para crear un vínculo duradero: la pareja, y así encontrar a la persona perfecta.
Por supuesto, la relación entre dos personas puede verse influenciada por factores distintos al amor: aficiones, necesidades sociales, responsabilidades o soledad. El matrimonio es una de las instituciones sociales más antiguas del mundo. Por eso, cada año, el último domingo de abril, se celebra el Día Mundial del Matrimonio.
¿Qué es el matrimonio?
El matrimonio es considerado una de las instituciones sociales más poderosas y culturalmente aceptadas, crea una unión conyugal entre dos personas, estableciendo lazos de parentesco. Es reconocido y reforzado por prácticas legales, comunitarias, religiosas y éticas.
La palabra «matrimonio» proviene de la palabra latina «matrimonium». Proviene de la expresión «matris munium» que se deriva de dos palabras latinas: «matris» significa «madre» y «munium» («carga o cuidado») significa «esposo/padre cuida de la madre».
Dependiendo de la cultura y la religión, esto significa la comprensión mutua de las relaciones basadas en cosas como la monogamia y la procreación. En este sentido, el matrimonio se define tradicional y legalmente como la unión entre un hombre y una mujer.
En los últimos años, el movimiento LGBT ha visto un cambio importante en este principio, logrando el reconocimiento legal de dos homosexuales en varios países.
La unión matrimonial entre dos personas conlleva una serie de derechos, obligaciones y requisitos que varían según las circunstancias culturales, religiosas y legales de las diferentes sociedades alrededor del mundo.
Actualmente, existen dos formas de matrimonio: civil (definido por el derecho interno, teniendo en cuenta derechos, obligaciones y requisitos) y religioso (según las normas y costumbres de la religión en que se celebre).
El matrimonio desde un punto de vista religioso
Iglesia Católica:
Es uno de los siete sacramentos católicos y celebra la unión de dos personas siendo bautizadas ante Dios. Es una unión inseparable para toda la vida, excepto en caso de muerte de uno de los cónyuges.
La máxima manifestación del matrimonio es tener hijos.
La Iglesia se opuso a la poligamia, el adulterio, las relaciones entre personas del mismo sexo y el divorcio.
Cristianismo Evangélico:
Tiene casi los mismos reglamentos de la Iglesia Católica.
Es una obligación que los novios, lleguen al matrimonio sin haber mantenido relaciones sexuales (En caso contrario, se considera un pecado muy grave)
No aceptan la poligamia, matrimonios con personas del mismo sexo y el adulterio.
No es una fiesta religiosa.
Judaísmo:
El matrimonio se basa en la ley de la Torá, en la que la pareja se dedica al otro (kidushin).
Tener hijos se considera un mandamiento.
Espiritualmente, el matrimonio es la unión de dos personas en una sola alma. Bajo este supuesto, un hombre se considera incompleto si no está casado.
La Biblia hebrea describe varios matrimonios con muchas esposas, y la poligamia es uno de los acuerdos más comunes en el Antiguo Testamento.
El judaísmo reformista sancionó los matrimonios entre personas del mismo sexo en 1996, restringiendo los matrimonios religiosos entre un hombre y una mujer.
Islamismo:
Es un acuerdo legal firmado por las partes, llamado nikah.
De acuerdo con la ley islámica, solo un cónyuge puede divorciarse legalmente por cualquier motivo.
Las bodas entre sunitas (grupos musulmanes) deben ser presenciadas por al menos dos personas (tutor de la novia y otro invitado).
Los matrimonios musulmanes chiítas pueden tener lugar sin testigos.
Hinduismo:
El matrimonio es una obligación sagrada con responsabilidades religiosas y sociales.
Entre los modelos de matrimonio existentes se encuentran gandharva vivaha (matrimonio voluntario inmediato), rakshasa vivaha (también conocido como matrimonio demoníaco, donde una pareja secuestra a su esposa).
Los matrimonios arreglados entre las familias de la novia y el novio todavía se llevan a cabo en gran parte del subcontinente indio.
La boda se celebra con grandes multitudes, música, baile, ceremonia y comida para bendecir a la pareja.
Budismo:
El matrimonio es secular y se celebra sin distinción de religión. No está prohibido ni es obligatorio.
Las ceremonias civiles se llevan a cabo de acuerdo con la ley civil.
La delegación puede ser bendecida por monjes de los templos locales.