El hecho ocurrió en el barrio El Progreso, al final de la calle Ambay de Oberá, donde un incendio destruyó una casa.
Se trata de una vivienda de mampostería y madera de 14×6 propiedad de Alejandro G. De 58 años.
El fuego se habría originado en una de las habitaciones de la misma con propagación hacia toda la estructura; en tanto el cableado de la instalación eléctrica presentaría unión de filamentos con perla tipo soldadura característico de un desperfecto eléctrico, siendo dicho elemento incautado bajo Acta y formalidades legales.
La causa del incendio radicaría en un desperfecto eléctrico, produciéndose la afectación total de la construcción.
Se trata de una vivienda familiar en la que, además, funcionaba el merendero vecinal «Corazón Felíz», ubicada en el Barrio El Profreso de nuestra ciudad.
Al momento del hecho, se encontraban en la misma sus inquilinos Valeria Mariana R. (37) y Javier S. N. (29), junto a sus hijos Santiago (14), Alejandro (10) y Joselin (04), quienes resultaron ilesos.
La madre de los menores habría sido quien detectó el fuego cuando se despertó y advirtió que se estaba incendiando el cielorraso del domicilio, intentando sofocarlo pero, al no poder hacerlo, salió de la vivienda junto a toda su familia.
La policía tomó conocimiento del hecho alrededor de las 2.40 horas de hoy a través del CIO 911, constituyéndose inmediatamente en el lugar la División Bomberos UR II y Bomberos Voluntarios que a pesar del arduo trabajo realizado nada pudieron hacer, dado que la acción del fuego quemó la totalidad de la casa; estableciéndose que el foco ígneo podría haber sido causado por un desperfecto eléctrico.
No se registraron lesionados pero si la pérdida del 100% del domicilio y pertenencias de la familia por acción del fuego.
El merendero “Corazón Felíz” funcionaba en el sector del corredor trasero y estaba a cargo del mismo Araceli Andrea G. (25); brindándose asistencia a 70 chicos, aproximadamente.