El falso astronauta dijo que quería comenzar una nueva vida en Japón, declarando su “amor por la víctima”, y que se casaría con ella a su regreso a la Tierra. Mientras uno se hacía pasar por el cosmonauta, otro recibía el dinero.
El estafador enviaba mensajes como “Quiero comenzar mi vida en Japón”, y “Decir esto mil veces no será suficiente, pero lo seguiré diciendo: te amo”.
Conmovida, la mujer envió entre el 19 de agosto y el 5 de septiembre un total de 4.4 millones de yenes (unos 30 mil dólares) a través de cinco transferencias bancarias separadas.
No obstante, sus sospechas fueron creciendo con el paso del tiempo, hasta que cortó la comunicación con los estafadores y se comunicó con la policía local.
No es la primera vez que existe una estafa con falsos astronautas. Lo más curioso, como señala el portal El Diario NY, es que no es la primera estafa en línea con temática espacial.
Para 2016 ocurrió una similar: alguien se acreditaba ser el primo del “primer astronauta de Nigeria, Abacha Tunde”.
El correo que se remitía a las posibles víctimas es que “Tunde se había quedado a bordo de una estación espacial soviética cuando la URSS se disolvió” a inicios de los 90.
“Abacha Tunde” no existe, y tampoco ningún nigeriano ha viajado al espacio. Se desconoce cuántas personas resultaron estafadas por esta situación, pero no deja de ser un caso tremendo.
(Fuente: LV)