Javier Milei mostró su apoyo de forma limitada al comunicado final del G20 de Brasil al expresar su desacuerdo con las disposiciones relacionadas con la agenda 2030 de las Naciones Unidas.
Además, rechazó la idea de implementar un impuesto a los multimillonarios y reafirmó su postura en cuanto a la situación en Ucrania y el conflicto en Oriente Medio.
Durante la segunda sesión de debate del G20, el presidente expresó su posición. Cuando los demás líderes ya habían dado su apoyo al comunicado final, Lula da Silva le concedió la palabra a Milei. Fue en ese momento cuando el presidente argentino expresó abiertamente sus discrepancias acerca de la Agenda 2030, Israel y Ucrania.
En la segunda sesión, el discurso de Milei logró mantener su postura ideológica, a pesar de no quedar expresada oficialmente en el documento final del G20. Es un método diplomático utilizado en anteriores reuniones del G20 que permite mantener la cohesión del foro multilateral y al mismo tiempo respetar las opiniones divergentes de algunos líderes.
En el G20, Milei mantuvo una postura coherente con su ideología, sin embargo, al momento de comunicar las decisiones del gobierno liberal, emitió dos comunicados consecutivos en lugar de presentar un mensaje unificado. Esto generó confusión y dificulta la transmisión de los conceptos expresados por el Presidente en un contexto internacional complejo.
La Casa Rosada envió un comunicado oficial desde Río de Janeiro: “Por primera vez desde que es parte, el Gobierno Nacional firmó (sic) la declaración de presidentes asociándose parcialmente de todo el contenido vinculado a la Agenda 2030″.
En otro comunicado emitido desde Río de Janeiro, el Gobierno volvió a expresar su postura respecto al conflicto en Ucrania, la actividad terrorista contra Israel y la posibilidad de establecer un impuesto a las grandes fortunas de los super ricos.
“Al margen de las consecuencias negativas que tiene sobre la acumulación de capital y, por ende, en el crecimiento económico, la Argentina considera que no es correcta la mención de ciertas categorías de pagadores de impuestos, por ejemplo los ultra-rich, a ser potencialmente gravados, por ser discriminatoria y también implicar un trato desigual frente a la ley”, dice el comunicado argentino emitido desde Brasil.
A pesar de la variedad de comunicados oficiales emitidos, el presidente reafirmó su postura ideológica acerca de la importancia de los organismos internacionales en la lucha contra el cambio climático, la pobreza y la igualdad de género.
El comunicado del Gobierno Argentino dice:
“Los organismos y foros internacionales como el G-20, se crearon con el espíritu de que todas las naciones involucradas pudieran reunirse para cooperar de forma voluntaria, en calidad de iguales y autónomas, para, entre otras cosas, salvaguardar los derechos básicos de las personas. Sin embargo, hoy, a casi 70 años de haberse inaugurado este sistema de cooperación internacional, llegó la hora de reconocer que este modelo está en crisis, porque desde hace tiempo que está en falta con su propósito original”.
También agrega: “El Presidente Javier Milei ha dejado en claro en su participación del G-20 que no acompaña varios puntos de la declaración, entre ellos; la promoción de la limitación de la libertad de expresión en redes sociales, el esquema de imposición y vulneración de la soberanía de las instituciones de gobernanza global, el trato desigual ante la ley y especialmente, la noción de que una mayor intervención estatal es la forma de luchar contra el hambre”.
En Río de Janeiro se emitió otra declaración oficial, más precisa en cuanto a la agenda geopolítica de Milei, además del comunicado enviado desde Balcarce 50.
En este caso, se destaca la postura constante del presidente en relación con la crisis en Medio Oriente y el conflicto en Ucrania.
“La Argentina considera que el mundo está atravesando un momento de grave peligro en materia de seguridad internacional, con violaciones a la integridad territorial de algunas naciones, como Ucrania, y con acciones que buscan expresamente la desaparición del Estado de Israel”, explica la declaración.
Agrega: “Creemos que los líderes del G20 deben expresarse sobre la ayuda humanitaria, la liberación de rehenes y las gestiones de paz, pero sin ignorar las acciones ilegales de quienes atacan al Estado de Israel desde distintas naciones y a través de fuerzas militarizadas o terroristas, que son parte esencial del conflicto”.
El presidente de Brasil aboga por la implementación de la Agenda 2030 como estrategia para abordar la pobreza y el hambre a nivel mundial, en contraste con la postura contraria de su homólogo argentino.
“En el combate contra estos flagelos, el Presidente Javier Milei tiene una posición clara: si queremos luchar contra el hambre y erradicar la pobreza, la solución está en correr al Estado del medio, según un comunicado redactado en Balcarce 50.
Y termina diciendo: “Debemos desregular la actividad económica para liberar el mercado y facilitar el comercio, y que el intercambio voluntario de bienes y servicios sea lo que traiga prosperidad. El capitalismo de libre mercado ya sacó de la pobreza extrema al 90% de la población global y duplicó la expectativa de vida”.
Gerardo Werthein, canciller, y Federico Pinedo, sherpa argentino en el G20, detallaron a sus colegas en Río de Janeiro las numerosas objeciones de Milei con respecto a los borradores del comunicado final. La persona se negó a seguir las directrices de Lula en temas polémicos como la invasión de Rusia a Ucrania y el ataque terrorista de Hamas a Israel.
Werthein y Pinedo anunciaron que Milei revisará minuciosamente cada uno de los párrafos del comunicado final del G20 de Brasil antes de poner su firma en el documento.
En caso de que el contenido del documento diplomático no coincidiera con sus opiniones personales e ideológicas sobre temas como el desarrollo sostenible, el cambio climático, el conflicto en Ucrania y la crisis en Medio Oriente, se negaría a firmar la declaración del G20.
De esta forma sucedió: Milei optó por no entorpecer la cumbre del G20 y finalmente respaldó con ciertas reservas el comunicado final.