Se cumplen hoy seis meses de la asunción de Javier Milei como presidente de la Argentina, fueron más golpes que victorias y por el momento el gobierno enfrenta una semana decisiva.
Hace un año atrás muy pocos esperaban que llegara, mientras otros soñaban con lo imposible. 6 Meses después, y contra toda la partitura política partidaria, Javier Milei fue elegido con el 55.65 %. Más de la mitad de los argentinos eligieron un camino muy alejado de la política tradicional. Aunque la advertencia del candidato libertario, que decía a viva voz que iba a detonar todo el sistema y traía bajo el brazo un mega ajuste en el estado en general.
A seis meses de asumir, Milei no tiene muchas victorias para contar, ni muchos momentos de paz para recordar. Desde que arrancó el gobierno surgieron conflictos, escándalos, denuncias, renuncias y trabas y más trabas que le pone la oposición.
Lo positivo, y quizás sea el logro más difícil, algo que el gobierno de Alberto Fernández, aun con todos los cambios nunca pudo alcanzar, sea la baja de la inflación que llegó a 25,5% en diciembre, el primer mes de gobierno de La Libertad Avanza, y terminó cayendo a 5% en mayo, una proezas que sin duda es cien por ciento mérito de Milei y su equipo.
Como también el Gobierno logro estabilizar al dólar, que en la época de Massa parecía estar en un sube y baja continuo.
Aunque para lograr bajar estrepitosamente el descalabro de precios, el gobierno tuvo que dejar de emitir y «sacar a la calle» la aspiradora de pesos, algo que hizo caer la economía, bajar las ventas y ya provocó despidos en distintos rubros.
El famoso «No hay plata» es tan real para casi todos, pero en especial para los de clase media hacia abajo.
Quizás lo que más afecta a los ciudadanos, sea el sinceramiento de precios, sobre todo el de los servicios y los combustibles. El Gobierno de Alberto y Cristina, se encargó de pisar un resorte de aumentos, del primer día de gobierno hasta el último. Hasta que finalmente, cuando dejaron de presionar el resorte hacía abajo, el mecanismo saltó hacía arriba de manera incontrolable.
Las tarifas están haciendo que las industrias, los comercios y las pymes, comiencen a recortar gastos y los primeros que aparecen en la lista del achique, son los trabajadores.
El ajuste, la falta de pesos, la pérdida de empleo, hace que el consumo siga bajando mes a mes.
Ante este panorama crítico, se sumaron los escándalos en el gabinete. La salida de Posse del Jefe de Gabinete, Pettovello en la mira por escándalo de los alimentos guardados a punto de vencer. Los enfrentamientos con otros presidentes y los revuelos internacionales.
A todo esto, el Gobierno no ha podido sacar una sola ley en 6 meses, y el único DNU que trató de impulsar, todavía se suspende, descansando y se tambalea en los fueros judiciales.
Esta semana, el Gobierno vuelve a intentar en el Senado sacar la famosa Ley de Bases, una iniciativa que ya había caído en diputados y tuvieron que reformar totalmente para intentar pasar por el congreso.
Se dice que si el Gobierno de Milei no logra sacar la tan ansiada ley, los mercados comenzarán a agitarse, el riesgo país volvería a subir y en el escenario volvería a surgir una nueva tormenta para el gobierno.
Aún así, Javier Milei sigue manteniendo la popularidad, aunque un poco se cayó, no llega a ser preocupante para el Gobierno. Muchos de los votantes, siguen esperando que la tormenta pase y en el horizonte aparezca la gran bonanza económica, permite que la Argentina vuelva a ser un país ordenado, viable y estable.
