Un árbol cayó sobre una vivienda en Oberá tras la tormenta. Bomberos trabajaron en el lugar y no hubo personas heridas.
La noche del domingo dejó su huella en Oberá. Pasadas las 19:45, la calma se quebró en la intersección de las calles Alejandro I° y Juan D. Perón, cuando un árbol cedió ante la furia del temporal y terminó desplomándose sobre una vivienda de madera, con techo de chapa, que no resistió el impacto.
El estruendo alertó a los vecinos y en minutos el lugar se convirtió en un escenario de emergencia. Una dotación de Bomberos llegó al sitio y, entre luces, motosierras y la urgencia del momento, comenzaron a cortar y retirar los restos del ejemplar para liberar la estructura.
El susto fue mayúsculo, pero dentro de la casa no hubo heridos, apenas daños materiales. Una postal repetida en épocas de tormentas, que vuelve a poner sobre la mesa el riesgo que representan los árboles añosos en medio de barrios residenciales.




