El exgobernador y expresidente interino Ramón Puerta vuelve a encabezar una lista en Misiones. Con profesionales y referentes locales, busca instalarse como alternativa al kirchnerismo y la Renovación.
El histórico dirigente misionero Ramón Puerta decidió regresar al centro de la escena política con una lista que promete “seriedad opositora” y un peronismo lejos del kirchnerismo. Donde aparecen profesionales y referentes del interior, busca reabrir un capítulo que la política provincial parecía haber cerrado.
Puerta fue dos veces gobernador en los ’90, legislador nacional, presidente interino de la Nación en plena crisis de 2001 y embajador en España. También es empresario yerbatero, lo que lo conecta con el núcleo productivo misionero.
Con este pasado, su candidatura pretende transmitir experiencia y peso político, aunque inevitablemente revive viejas discusiones sobre las responsabilidades de la clase política en las crisis que marcaron al país.
La lista suma nombres con presencia territorial y discursos de compromiso comunitario:
Karina Griss, empresaria de Puerto Rico, con fuerte vínculo en el sector foresto–industrial y promotora de proyectos solidarios como Pelucas Solidarias, con más de 120 entregas realizadas en Misiones.
Alejandro Rodríguez, militante de Posadas.
Julieta Koch, abogada de San Vicente, egresada de la UBA, la más joven de la nómina.
Héctor Ariel Salguero, abogado de Oberá.
Marina Raineck, penalista de San Pedro, candidata a intendenta en 2023 y referente opositora local.
Con esta propuesta, Puerta pretende reconstruir un peronismo productivo y no kirchnerista, ubicándose en la vereda opuesta de la Renovación y del oficialismo nacional. El mensaje es claro: instalarse como alternativa, recuperar la identidad peronista que, según él, fue vaciada por las últimas gestiones, y representar a sectores productivos y profesionales de Misiones.
Sin embargo, el regreso de Puerta también expone una paradoja de la política argentina: mientras la sociedad demanda renovación y nuevas caras, los escenarios electorales vuelven a girar alrededor de dirigentes con décadas de trayectoria. El interrogante es si los misioneros verán en este retorno una oportunidad de cambio o el reciclaje de la misma dirigencia que estuvo en los momentos más críticos de la historia reciente.
