Se llegó a un acuerdo entre la Unión Tranviarios Automotor (UTA) y el Gobierno, por lo que se decidió cancelar el paro de colectivos que estaba programado para mañana.
Después de dialogar con las autoridades de Trabajo y la Asociación Argentina de Empresarios del Transporte Automotor, el sindicato tomó la determinación.
El sindicato encabezado por Roberto Fernández estaba bajo una conciliación obligatoria dictada por la Secretaría de Trabajo, lo que le impedía tomar medidas de fuerza hasta el martes 29. Por lo tanto, estaba en su derecho de sumarse al paro convocado por otras ramas del transporte para el miércoles.
Sin embargo, optó por no llevarlo a cabo debido a las discrepancias con la facción más radical de la CGT, en particular con los Moyano. En ese contexto, el experimentado líder sindical decidió tomar un rumbo diferente en el conflicto, anunciando un posible paro para este jueves y llevando la negociación hasta el límite antes de finalmente llegar a un acuerdo.
La UTA había estado solicitando un aumento del 24,7%, a partir de agosto, sobre el salario actual con efecto retroactivo. Desde el mes de julio, los conductores de colectivos percibían un salario básico de $1.060.000, el cual se espera que aumente a $1.322.000 para el mes de diciembre. Las autoridades nacionales argumentaban que ya se habían producido aumentos recientes.
Las cámaras de transporte automotor en el AMBA afirmaron que tenían un saldo pendiente de más de $20.000 millones por concepto de compensaciones tarifarias de julio, lo que les dificulta cumplir con la solicitud salarial de la UTA.
El encuentro del miércoles comenzó a las 5 de la tarde y concluyó casi a las 8. Martín Huidobro, subsecretario de Trabajo, lideró la reunión.