A mediados de septiembre, Carlos Rívolo, el fiscal federal que investiga el ataque a la vicepresidenta Cristina Kirchner, le solicitó a la Justicia porteña que investigue a Fernando Sabag Montiel por pedofilia, luego de que se hallaran en su teléfono celular fotos de menores de edad “participando de actividades sexuales explícitas”, según figura en el escrito
En la solicitud, Rívolo pidió la extracción de testimonios a la Justicia Penal, Contravencional y de Faltas de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, para que dé intervención a la Unidad Fiscal Especializada en Delitos y Contravenciones Informáticas.
La causa fue recibida por la fiscal Daniela Dupuy, que pertenece al Ministerio Fiscal Porteño. En las últimas horas, según confirmaron fuentes judiciales a este medio, Sabag Montiel fue imputado por la a tenencia con fines de distribución de 119 archivos de imagen y videos y la distribución de 3 videos. Todos los archivos mostraban a niños y niñas menores de 13 años.
También, se anunció que “próximamente” se requerirá la elevación del caso a juicio oral y público.
En rigor, Sabag Montiel recibió una intimación, que ocurre cuando la Justicia considera “que existe sospecha suficiente de que una persona puede ser autor o partícipe de un delito”. Así, se “le deberá notificar mediante acta los hechos que se le imputen, en forma clara, precisa y circunstanciada, y las pruebas que haya en su contra”, de acuerdo al Código Procesal.
En el acto, el acusado de intentar asesinar a la vicepresidenta criticó cuestiones vinculadas al procedimiento y afirmó que en una semana presentará un escrito formal junto a su defensora.
En un principio, el celular de Sabag Montiel había sido reseteado. Las imágenes fueron encontradas en la tarjeta SD del aparato y luego fueron derivadas a la Justicia porteña. Por otra parte, la Policía de Seguridad Aeroportuaria logró recuperar gran parte de los datos que había en el equipo, sus cuentas de mail con sus respectivas nubes y sus grupos de Telegram. Las conversaciones de WhatsApp en la previa al ataque se perdieron.
Hasta fines de la semana pasada, no se encontró ningún contenido que apunte a la planificación del intento de homicidio de Cristina Fernández de Kirchner por parte de más sospechosos, revelaron a Infobae fuentes del caso. También, se hallaron más selfies con el arma Bersa utilizada en el ataque, así como contenido relacionado a grupos esotéricos. La carta natal de la vicepresidenta era de particular interés de Sabag Montiel.
Según un informe de la Dirección de Asistencia Judicial en Delitos Complejos y Crimen Organizado, se detectó en las primeras horas de la investigación que Sabag Montiel tenía un segundo teléfono, que todavía no fue hallado, una línea investigativa que perdió fuerza pero que no fue abandonada.
(Fuente: Infobae)