En un juicio abreviado en Santa Fe, se dictaminó una condena de 1 año y 8 meses de cárcel para un hombre que le pegó a su hijo menor con una ojota.
Raúl Z., de 41 años, fue sentenciado a un año y ocho meses de cárcel en la ciudad de San Jorge, provincia de Santa Fe, por haber agredido a su hijo menor con una ojota. El juez Pablo Spekuljak impuso la pena a través de un juicio abreviado que se unió a un proceso previo.
La violencia familiar tuvo lugar entre el 7 y 8 de septiembre de 2024 en una localidad con menos de veinte mil habitantes en el departamento de San Martín. Diego Rodríguez y Barros, fiscal encargado del caso, explicó que “el condenado golpeó a su hijo con una ojota y le ocasionó lesiones en la espalda y en la pierna izquierda”.
“El niño y su hermano pasaron el fin de semana con su padre cumpliendo un régimen de visitas acordado”, afirmó el fiscal que además agregó que “cuando lo estaba bañando, la madre de la víctima vio las lesiones, le preguntó por lo ocurrido y el niño contó que su padre le había pegado porque se había peleado con su hermano mayor”.
Rodríguez y Barros confirmó que el segundo niño corroboró la versión de la víctima y la madre presentó la denuncia correspondiente. El individuo fue acusado de cometer delito de lesiones leves intencionales con agravantes de parentesco y aceptó su culpabilidad.
Según el funcionario, Raúl Z fue hallado culpable de lesiones graves y recibió una pena condicional, así como reglas de conducta. El funcionario de la Justicia informó que, debido a la nueva condena, se revocó la modalidad de cumplimiento de la anterior y se unificaron las penas en un año y ocho meses de prisión efectiva.
De esta manera, Raúl Z, en compañía de su abogada defensora, accedió a la cantidad y la forma en que se cumpliría la pena impuesta, además de aceptar la decisión de agilizar los procedimientos del juicio. La madre de la víctima fue informada de la decisión tomada y estuvo de acuerdo con lo acordado.