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El presidente Alberto Fernández y la vicepresidenta Cristina Kirchner almorzaron en secreto para limar sus asperearas 

 

 

 

El Presidente y la Vicepresidenta se encontraron cara a cara por primera vez desde el cambio de Gabinete. Evaluaron estrategias para generar un “cambio de clima” de cara a las generales

 

 

Después de las peleas por la derrota en las PASO y el cambio de Gabinete, el presidente Alberto Fernández y la vicepresidenta Cristina Kirchner se encontraron cara a cara.

 

 

 

El encuentro secreto tuvo lugar este martes en la Quinta de Olivos, donde compartieron un almuerzo para tratar de limar asperezas tras la carta de la vicepresidenta que le generó un gran desgaste al mandatario y una crisis en la Casa Rosada.

 

 

 

Alberto Fernández encabezó un plenario multitudinario convocado por los movimientos sociales junto a Máximo Kirchner. El oficialismo seguirá confrontando con la oposición y organizando actos masivos.

 

 

 

Entre los temas que se abordaron ese día, se habló de impulsar el “plan platita” con medidas como el aumento de las asignaciones familiares. Evaluaron encuestas y analizaron la evolución del dólar, que podría afectar las aspiraciones electorales del Gobierno, y el endurecimiento del cepo cambiario para contenerlo.

 

Alberto y Cristina almorzaron

 

 

Si bien Alberto Fernández y Cristina Kirchner no hicieron del todo las paces, la reunión fue de contención. Sigue la tensión en lo más alto del poder, pero lograron bajar los decibeles de la pelea de cara a las elecciones legislativas del 14 de noviembre. Este jueves el Gobierno relanzó la campaña y dejó definido el discurso: polarización, “unidad” y “épica” para salir a cazar el voto ausente.

 

 

 

Entrevistada en Verdad Consecuencia, la candidata oficialista a diputada se defendió: “No fui parte de la organización sino que fui invitada, por eso no puedo rendir cuentas”.

 

 

 

El Presidente llegó al club Nueva Chicago acompañado nada menos que por el hijo de la vicepresidenta, Máximo Kirchner. También lo siguieron el ministro del Interior, Eduardo “Wado” de Pedro, que desencadenó la seguidilla de renuncias de funcionarios cristinitas tras las primarias de septiembre.

 

 

 

No obstante las diferencias sobre cuestiones de fondo entre el Presidente y su vice siguen y resta por ver qué pasará el 15 de noviembre.

 

 

 

 

La tensión por el futuro de la Corte Suprema

 

 

 

 

Otro gran capítulo en la mesa de negociación entre el Presidente y la Vice pasa por el futuro de la Corte Suprema, que a partir de noviembre quedará con cuatro integrantes tras la renuncia de Elena Highton. Cristina Kirchner sueña con poder dominar el máximo tribunal y tiene sus propias candidatas a reemplazar a la jueza que deja su cargo a partir del 1° de noviembre.

 

 

 

 

Una de ellas sería Marisa Herrera, que integró la llamada “Comisión Beraldi” que propuso cambios para hacer reformas en la Justicia. La otra postulante sería Graciana Peñafort, una de las preferidas de la vice y que es directora de Asuntos Jurídicos del Senado. Este jueves, Peñafort celebró hasta con un llanto de emoción el sobreseimiento de Cristina Kirchner en la causa por el Memorándum con Irán.

 

 

 

(Fuente: TodoNoticias)

 

 

 

Por Revista Enterate

Panel principal de periodista de Revista Enterate

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