Los hermanos Kiczka declararon ante el juez, pero se negaron a responder preguntas. En el caso de Germán dijo que aún se siente diputado de Misiones.
Sebastián Kiczka fue el primero en declarar, aunque dijo que no era una declaración, si no una aclaración. En la misma buscó hacerse responsable de todos los delitos y despegar a su hermano menor, el ex diputado puertista. Sebastián dijo que el era que ocupaba la computadora Aser que estaba a nombre de Germán y fue encontrada en la casa de su padre donde vive Sebastián. Además, se hizo cargo del material de MASE que había en la notebook.
Luego fue el turno de Sebastián, quien aclaró que no iba a responder preguntas y solo iba a emitir una breve declaración.
“Me declaro total y absolutamente inocente de todos los cargos que se me imputan”, comenzó diciendo el ex diputado. Agregó “Jamás en mi vida descargué, me interesó, mucho menos compartir material de pornografía infantil ni nada que se le parezca”.
En una estrategia elaborada por las dos defensas, Kiczka trata de despegarse de los dispositivos a su nombre en los cuales se encontraron 913 de MASI que fueron compartidos con usuarios no identificados.
El ex legislador niega ser dueño de los dispositivos que contenían los materiales aberrantes: “En todos los dispositivos electrónicos utilizados por mí, no hay nada; y mire que me allanaron, señor Juez. Mi casa, mi oficina en la cigarrillera, mi oficina en la legislatura, la casa de mis suegros y no encontraron absolutamente nada así que niego rotundamente todos los cargos” Afirmó
Kiczka sigue sosteniendo que todo es una persecución política. “Quiero declarar que esto es sí es una persecución política, lo fue siempre, lo fue desde un principio. El gobierno sabe qué destruyéndome a mí, destruye a mi partido y destruye a la única oposición real de la provincia” En este contexto agrega: “Yo fui el único diputado de los 40, que en repetidas veces me opuse firmemente a leyes nefastas, que el gobierno provincial quería implementar en detrimento de la provincia. Y si uno analiza las leyes a las que hago referencia, se va a dar cuenta que no es necesario ser Mandela para ser un perseguido político, como se dijo aquí en este recinto”
En este caso Kiczka se refería al fiscal quien al sostener la acusación dijo que nadie conocía a Kiczka como diputado, por tanto, no ve persecución política.
“La cámara se apresuró en expulsarme, a pesar de que yo ya había renunciado a mis fueros, mostrando una total apertura y colaboración con la justicia, de todas formas, me expulsaron de forma inconstitucional y sin siquiera darme la posibilidad de defensa” y añade en su declaración, “Es por eso que yo aún me siento y aún soy diputado de la provincia de Misiones”.
Dicho esto, se retiró a su lugar con sus abogados, negándose a responder preguntas de las fiscales y jueces.