Se llama Ángel y todavía pelea por su vida, nació prematuro y lo habían dado por fallecido. La abuela insistió verlo y descubrió algo inquietante.
En la localidad de Las Heras, provincia de Santa Cruz, se produjo un impactante caso de milagro y esperanza, cuando Ángel, un bebé que nació de manera prematura a los siete meses, fue declarado muerto por los doctores, después que su madre diera a luz en un baño del hospital.
Todo empezó en la mañana del 25 de marzo, cuando Maira Victoria, de 18 años, llegó al hospital zonal de Las Heras en compañía de Braian, su pareja, tras experimentar intensos dolores en la panza. Después de recibir atención, los doctores le recetaron paracetamol y sertal, pero los dolores persistieron.
“Le dijeron que se trataba de cólicos y le administraron analgésicos. Sin embargo, a la media hora mi sobrina volvió al hospital porque tuvo un sangrado inesperado en su casa”, relató Camila, tía de Maira, al TodoNoticias.
Luego de un examen, los doctores descartaron la posibilidad de que se tratara de un parto, pero le solicitaron un examen de laboratorio para confirmar los síntomas. Maira no logró expulsar sangre, ya que en el mismo baño del hospital sintió que su bebé estaba naciendo.
Maira tuvo a su hijo en el baño, con la asistencia de los doctores. Ángel, su hijo, había nacido de forma prematura, con apenas 1,3 kilogramos de peso. Por su delicada condición de salud, fue llevado de manera inmediata a un centro médico de mayor complejidad en Caleta Olivia.
El bebé experimentó un paro cardíaco después de su nacimiento y, pese a los esfuerzos de reanimación, los doctores lo declararon como fallecido. La noticia resultó devastadora para los progenitores, quienes quedaron inmersos en el sufrimiento de haber perdido a su hijo antes de tener la posibilidad de conocerlo. La familia recibió la notificación de que el infante ya no mostraba signos vitales y se le entregó un certificado de defunción.
En ese instante, la abuela de Ángel, que acompañaba a su hija desde Las Heras, solicitó ver el cuerpo de su nietito. Para ese momento el bebé ya había sido puesto en la morgue, cubierto de sábanas, y se había registrado la hora de su nacimiento y muerte. No obstante, la madre de Maira insistió en ver el cuerpo del recién nacido.
“Fue ella quien se dio cuenta de que estaba calentito. Cuando lo alzó notó que estaba respirando. Ahí vinieron los médicos y los trasladaron nuevamente a Caleta Olivia para ingresarlo al quirófano”, añadió Camila.
La familia, todavía sorprendida por lo ocurrido, solicita ayuda para cubrir los costos del traslado: “La familia debe hacer un complicado y costoso viaje de Las Heras a Caleta Olivia, son casi 140 kilómetros. Y un auto hasta allá cobra alrededor de $70.000 u $80.000″, declaró la tía de la madre del pequeño.
En este momento, Ángel sigue internado en la unidad de neonatología, donde continúa batallando por su vida. Su condición de salud continúa siendo reservada.
Para colaborar con la familia de Ángel:
CBU: 0000003100076405769853.
Alias: Braian.fuentes08.